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El convulso escenario electoral en Chile || Segunda vuelta.

“La historia es nuestra y la hacen los pueblos”

Por: K. De Ita C.

Escenario previo a la segunda vuelta:

El pueblo chileno ejerció el derecho al sufragio una vez más desde el anhelado regreso a la democracia en la “Elección presidencial de Chile de 2021”, sometida a la fecha del 21 de noviembre del año en curso, la que recibió una participación correspondiente al 47,34 %, siendo para efectos numéricos, un a intervención de 7, 115, 590 de votantes.

El tradicionalismo de las candidaturas mutó, a efecto de las multitudinarias manifestaciones sociales que sacudieron los cimientos del Chile durante 2019 y la brutal e infundada respuesta del Estado. La consecuencia inmediata en el escenario partidista fue el surgimiento y resurgimiento de partidos políticos que, bajo el statu quo, eran poco más que satélites sometidos a la agenda de las coaliciones electorales que, sin ser fieles representantes de sus principios, eran lo más cercano a lo que podían sumarse para tener participación en la política chilena y no hundirse en el anonimato.  

El particular caso de Chile guarda semejanzas con la ya tradicional política electoral de Brasil  y, así mismo, es un paralelismo con fenómeno partidista que azota a la Argentina. En este sentido, no existe ya una polarización, sino una  peligrosa fragmentación, a la  que responden tendencias extremas, no por convicción, sino por temor u odio, que han sido capitalizadas por polémicos personajes. Los presagios se advirtieron en el ejercicio democrático de 2017, donde las elecciones presidenciales y parlamentarias fueron testigo de una mayor cantidad de fuerzas políticas representadas, en decremento de la Nueva Mayoría, donde la centroizquierda y la izquierda  se distanciaron, y esta última retomo la identidad que habían mesurado en beneficio de la coalición. Aunado a lo anterior, los resultados del Plebiscito nacional de 2020, acentuaron las diferencias existentes y tensaron las ambiciones políticas con miras a Mayo del 2021.

Ante las elecciones de convencionales constituyentes del mayo de 2021, se esperaba que las diferentes fuerzas de izquierda avanzaran en conjunto hacia una candidatura presidencial única, no obstante tal ambición quedo en una mera quimera. La vieja guardia conformo un pacto electoral denominado “Unidad Constituyente”, mientras que las coaliciones de “Chile Digno” y “Frente Amplio” confirmaron pacto único para la elección de constituyentes llamado “Apruebo Dignidad”.

Protagonistas:

Apruebo dignidad.  El “Frente Amplio” vivió una efímera convulsión interna en búsqueda de sus precandidatos sin que ninguna figura estuviese dotada de carácter oficial; el único precandidato presentado formalmente fue el exlíder estudiantil Gabriel Boric, diputado por Magallanes y fundador del partido Convergencia Social, quien por medio del partido citado alcanzo el mínimo de adherentes requerido un día antes del límite legal.

Por otra parte, el “Partido Comunista de Chile (PCCh)” presentó la candidatura del alcalde de Recoleta, Daniel Jadue, quien fue oficialmente proclamado el 24 de abril de 2021.

Finalmente, en las primarias del 19 de julio de 2021, Gabriel Boric se convirtió en el candidato único de “Apruebo Dignidad”, al obtener el 60,4 % de los votos, superando a Daniel Jadue.

Partido Republicano. Fundado en 2019 por José Antonio Kast, quien durante el 2017 y perteneciendo a la “Unidad Democrática Independiente” (UDI) se postuló con aspiraciones a la presidencia de la república. El “Partido Republicano” es considerado como un partido de extrema derecha, de corte ultraconservador, nacionalista y pinochetista. Dentro de sus estatutos definitivos (Declaración de  Principios)  manifiesta que son “absolutamente contrarios al aborto en todas sus formas” y a la eutanasia, declara que creen en Dios, y en una familia fundada en el matrimonio entre un hombre y una mujer, así como una lucha en contra de la migración, bajo la máxima justificante de la patria. El partido promueve, además, “una economía social de mercado; férrea defensa de la libre iniciativa privada en materia económica, y defensa de las garantías constitucionales.

En marzo de 2020, el “Partido Republicano” se declaraba oficialmente en oposición al segundo gobierno de Sebastián Piñera, acusando a su gobierno de “haberse rendido frente a las ideas de izquierda  que tanto daño le hacen al país”. 

Finalmente, el 19 de julio de 2021 Kast, apegado a la nostalgia pinochetista del siglo pasado, anunció su candidatura presidencial “para derrotar al comunismo”.

Primera vuelta:

La primera vuelta presento una participación baja, en términos generales, donde se consolido un 47% de los votantes inscritos.

Este resultado constituyente presenta la diferencia más estrecha de las últimas dos décadas entre las dos primeras mayorías en primera vuelta, siendo, para este particular de 2,09 puntos porcentuales, donde Kast sumó el 27,91%, mientras que Boric obtuvo el 25,82%.

Una preocupante sorpresa fue el tercer lugar, perteneciente al liberal Franco Parisi, que consolido el 12,80%, porcentaje que será determinante en la segunda vuelta, y que posiblemente, de acuerdo con  la tendencia y el perfil de sus votantes, beneficien a Kast sobre Boric.

Boric dominó con amplia ventaja la zona metropolitana, de donde obtuvo casi la mitad de todos sus votos, siendo esto natural, puesto que este perímetro fue el que vivió las más  convulsas e intensas manifestaciones durante el ya lejano 2019.

El norte chileno fue repartido entre Kast y Parisi, por lo que podemos concluir que aquellos votantes serán el impulso de la derecha, puesto que el discurso antinmigración fue plenamente efectivo entre la población. Finalmente la zona sur fue dominada por la Kast y la zona austral fue repartida entre los punteros. No obstante, la Derecha obtuvo una hegemonía en senado, obteniendo el 50%. 

Votar a mal menor:

Este escenario la historia ya lo conoce. De continuar así la tendencia, en el peor de los casos es posible que Chile se convierta en el nuevo bastión de la extrema derecha en Latinoamérica; una extrema derecha rancia y decadente que permitirá el resurgimiento de peligrosas figuras. Posiblemente veremos en los próximos años el surgimiento en el país austral de una figura parecida a Franco Parisi (que guarda similitud con el “fenómeno Donald Trump”).

El peligro de la fragmentación se hace evidente. Los ciudadanos ya no aspiran a  votar por el mejor candidato, sino por aquél que represente un mal menor. Esto implica que la emisión del sufragio se simplifica al votar por una formula específica, ya no por simpatía o conveniencia, sino por odio o aversión a la otra opción.

Segunda vuelta:

El balotaje entre Boric y Kast será el domingo 19 de diciembre. Previo a las elecciones, tendrá lugar un debate entre ambos candidatos con fecha de 13 de diciembre a las 20:00 horas (17:00 en el centro de México)  organizado por la Asociación Nacional de Televisión de Chile.

Posterior al cierre de casillas se procede inmediatamente al conteo de votos y la difusión de los primeros resultados.  A las 20:00 horas locales,  Latinoamérica y el mundo conocerán el destino de Chile.

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