Reseña del Libro “Sabemos cómo vamos a morir”; por su propio autor Paco Ignacio Taibo II

La siguientes son palabras de Paco Ignacio Taibo II, para presentar su libro
“Sabemos cómo vamos a morir” en el marco de la Semana Negra de Gijón 2021, el 18 de julio de 2021.

He leído una carta en tres versiones distintas por los problemas de traducción hacían que hubiera distintitas variaciones, dicha carta tenía una frase que Mordecai Anielewicz,  recluido a la fuerza en el Gueto de Varsovia construido por los nazis para los judíos polacos, le enviaba a sus compañeros del exterior “nos vamos a quedar, hasta ahora los judíos sabemos que vamos a morir, pero ahora por primera vez sabemos cómo vamos a morir “, ellos iban a morir combatiendo.

Un grupo de jóvenes recluidos por la fuerza en el Gueto de Varsovia por los nazis en 1943, cuando se enteraron de los asesinatos en masa de judíos, decidieron formar una organización de resistencia llamada “Zydowska Organizacja Bojowa“que significa “Organización Judía de Combate“

Los jóvenes de la organización judía de combate Varsovia, -que sí que eran jóvenes de entre 16, 17, 18 años, el mas grande del Ghetto tenía 31 años-, conocen la historia de que el destino de centenares de judíos polacos es la muerte en Treblinka. De que en Treblinka existía un cuarto repleto de zapatos de todos los judíos asesinados que eran metidos en cuartos en donde había duchas que expulsaban gas zyklon B. De la existencia de trenes de Varsovia a Treblinka en donde cientos de judíos eran deportados, y que en el camino a Treblinka tenían que deshacerse de los judíos que murieron en el viaje, que despojaban a los asesinados de sus posiciones.

En el libro, más que contar, se aspira que el lector imagine los “cómo es en la realidad” esos años,  el cómo son las paredes, los muros, con los que cercan al Ghetto de Polonia, cómo es el Ghetto desde adentro, cómo surge la organización judía de combate, cómo es la salida de los trenes, que se ofrecía un pan y un bote de mermelada a aquellos que se subieran voluntariamente al tren hacia Treblinka, de cómo había colas para el tren de la muerte, que existía una estructura de clases dentro del Ghetto, que existía una mafia dentro del Ghetto de gánsteres polacos que ayudaban a la SS.

Así, va surgiendo lentamente dentro del Gueto de la Organización Judía de Combate nacida de la tradición del escautismo que se dedicaba a rendir culto a la naturaleza, eran mixtas y empiezan a organizarse para conseguir recursos para seguir luchando, con 24 pistolas y bombas molotov sabiendo que fuera de los muros del Gueto los esperaba un ejército excelentemente armado de nazis.

Taibo se pregunta a sí mismo: ¿Cómo cuentas la insurrección de los jóvenes que lograron derrotar 3 veces al lograr que sus armas caseras y bombas, estallen en los tanques nazis que querían entrar al Gueto? ¿Cómo fueron arrasados todos agrupados como compañeros en su último refugio, y que sus cuerpos nunca fueron encontrados para que no hubiera memoria?

Y remata: Tendrás que leerlo para saber cómo se pueden contar estas historias, pero todo esto sin tener un milímetro de ficción, no sé cómo contarlo, pero tengo que contarlo, tengo que confesar que me sentaba horas para poder armar el libro, pero las lágrimas me impedían escribir. Y es que si conozco la historia tengo que contarla.

No podemos darnos el lujo de olvidar, ni darnos el lujo de que el fascismo es inocente, es barbarie contra civilización, y entonces te das cuenta de que debes contar estas historias, les puedo decir que el heroísmo de este grupo de 300 jóvenes me reivindica a mi como persona.